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31 diciembre 2007

Fábulas sobre el Zorro Andino (Cusco)

El zorro y el cóndor
Juan Francisco CONDORI MERMA(13 años, cuarto grado de Primaria - Agosto de 1999)
Cuentan que el cóndor le había dicho al zorro «va a haber una fiesta en el cielo». El zorro deseaba ver y le dijo al cóndor «¿vamos juntos?». «No te voy a llevar porque no vas a aguantar el hambre» le contestó el cóndor. Pero el zorro exclamó «¡no me voy a morir de hambre!». Entonces el cóndor le llevó hasta el cielo. Allá, la gente se preguntaba «¿qué animal es éste?». El zorro permaneció en un rincón. Estaba royendo los huesos debajo de las mesas. El cóndor se desentendió del zorro y se fue. Después, el zorro buscó al cóndor y al no encontrarlo, suplicó al loro para que lo llevase. Este le pidio que alistase mucha soga. Al acabar, el zorro le dijo «hermano ya hice la soga». Entonces el loro le contestó «amárrate con la soga». El zorro se amarró a la cintura avisándole al loro «ya estoy amarrado» y le lanzó la soga. Cuando estaba en el medio del cielo el zorro le gritó al loro «loro, nariz de tiesto». El loro lo quiso soltar. Pero el zorro suplicó «ya no te voy a insultar más». Una vez más el loro lo llevó y ya estaban en el medio del mar cuando el zorro nuevamente lo insultó «loro, nariz de tiesto». Como le había insultado demasiado, el loro lo soltó. Entonces, el zorro había dicho a sus hijos «tiéndanme una frazada». Pero la gente colocó una piedra filuda para que se muera el zorro. Este se estrelló contra la piedra, se reventó la barriga y murió. Aquí acaba.

El cóndor y el zorro
Eulalia CONDORI MELO (10 años, tercer grado de primaria - Julio de 1999)

El cóndor y el zorro habían ido hasta la punta del cerro. Hicieron una apuesta para ver cuál de los dos iba a sobrevivir al frío. Empezó a llover. Se sentaron para descansar cuando una lluvia de nieve se puso a caer. Con una de sus alas el cóndor se tapó el cuerpo y se sentó sobre la otra. Pero el zorro sólo pudo encogerse sobre su cola para protegerse. Una nieve gruesa empezó y el zorro sintió frío. El zorro le preguntó al cóndor «¿tienes frío o no, cóndor?». «¿Cuándo un macho va a sentir frío?» le contestó y a su vez le hizo la misma pregunta «¿y a ti te está haciendo frío o no?». «¿Cuándo un macho va a sentir frío?» le respondió el zorro, casi muriéndose. De nuevo la lluvia cayó y el cóndor preguntó otra vez al zorro si tenía frío. Pero éste ya había muerto. Cuando paró la lluvia, el cóndor se estiró y se comió al zorro. Luego, ese cóndor liso se fue volando hacia el mar. Aquí acaba.

El gallo, el zorro y el pukupuku
Mauricio PARI CRUZ (11 años, tercer grado de primaria - Mayo de 1999)

El gallo Carlos y el zorro se fueron del Cuzco. En una semana llegaron a Lima. El zorro fue a robar el reloj del guardia Serapio, sacándolo por la ventana. Después le dio al gallo Carlos para que se fije en la hora. Carlos miró la hora para saber cuándo tenía que cantar. Pero al mismo tiempo que cantó, lo hizo también el pukupuku. Entonces el pukupuku se molestó porque había cantado el gallo y le dijo «cállate Carlos». Es que en los tiempos antiguos el pukupuku era el único que cantaba para despertar a los hombres. Ambos se retaron diciendo «vamos al puesto y apostaremos sobre la cantidad de hijos que podemos tener». En la madrugada se dirigieron al puesto policial donde el guardia Serapio tenía que hacer ganar a uno de los dos y les preguntó sobre la cantidad de hijos que podían tener. El gallo dijo «en un mes puedo tener más o menos veinte hijos» y el pukupuku dijo «en una semana puedo tener dos hijos». Entonces ganó Carlos y se vino con el zorro hacia Cusco. En el abra de Santo Cristo, que queda cerca al Cusco, los pukupuku estaban esperando a Carlos para matarlo. Pero el gallo había venido en un caballo blanco vestido con apariencia de hombre, por lo que los pukupuku no lo reconocieron y preguntaron al zorro «¿dónde está Carlos?». «Estaba por Lima cuando lo dejé» mintió el zorro. Después de haber dormido en el abra de Santo Cristo, los pukupuku regresaron a Lima para buscar al gallo. Al día siguiente, se encontraron con un señor y le preguntaron si había visto al gallo. Este les contestó «ayer se ha ido en un caballo blanco». «¿Dónde estará ahora? Ya no lo vamos a alcanzar» se lamentaron los pukupuku. Mientras tanto, Carlos y el zorro se dirigieron al Cuzco y llegaron a su pueblo. Desde entonces, sólo el gallo canta en la madrugada. El pukupuku se levanta tarde y ya no despierta a los hombres. Ahora, éste sólo vive en las lomas de Pampallacta. Aquí termina.
El raton y el zorro
Carlos PUMA HUARAYA (11 años, tercer grado de primaria - Junio de 1999)

Un ratón había entrado a la huerta del abuelo a comer flores. Había hecho estragos. El hombre pegó brea en el hueco del muro para que no entrara el ratón. Cuando quiso entrar se le pegó la brea. Pateó con una pierna pero se pegó más con la brea. Después, con las manos golpeó y luego golpeó con la cabeza diciendo «tengo fuerza en mi cabeza carajo». De la parte baja de Phusa llegó un zorro. «Me han hecho sostener un muro con la barriga» gritó el ratón. «¿Qué estas haciendo aquí colgado?» le preguntó el zorro. «No, hermano. Me voy a casar con su hija». «Yo me colgaré» dijo el zorro. El zorro liberó al ratón y éste se fue. En eso, llegó el hombre con un azote y le dio al zorro con el azote. Finalmente lo soltó y el zorro se fue. «En vano me has hecho sujetar la pared, ahora te voy a comer» le dijo el zorro al ratón. Este estaba haciendo un hueco en el suelo y le mintió al zorro diciéndole «va a llover fuego. Tú, entra a este hueco». El zorro que era sonso aceptó. Entonces el ratón dijo «y yo entraré a cualquier otro hueco, como soy pequeño voy a entrar. A ver, toca un poco» le dijo el ratón aprovechando para escaparse y le lanzó varios tipos de espinos encima con tierra y todo. «Es cierto» dijo el zorro y como le punzó, se asustó del dolor. Después de haberlo encerrado bien, el ratón se fue. El zorro empezó a excavar la tierra. Haciendo hueco en otro lado, logró salir por ahí. Mientras tanto, el ratón llegó sosteniendo un queso fresco con la boca y una de sus manitas. Entonces, el zorro le preguntó «¿dónde hay queso? llévame». «Está bien. Hay queso en la casa del abuelo» le contestó el ratón. En la olla de tiesto estaba el queso fresco. El zorro se puso a comer el queso metiendo la cabeza dentro de la olla hasta no poder sacarla. Entonces le dijo al ratón «¿dónde está el soplador?» con la intención de romper la olla. Pero éste sólo le alcanzó una paja. Luego, el zorro le preguntó «¿dónde está el mortero de piedra? ¿dónde está el mortero de piedra?» y el ratón le llevó estiércol de cuy. Después, el zorro preguntó «¿dónde está el batán? ¿dónde está el batán?» y se tropezó con la cabeza del abuelito. Este le dijo a su esposa «carajo me has hecho pegar por tu amante» y la golpeó, «¿acaso tengo amante?» dijo la viejita. El ratón salió de la casa mientras el zorro estaba encogido debajo de la cama. En eso, el abuelito vio al zorro pero no logró alcanzarlo y éste se escapó por la puerta desgajando un pedazo de ella. Después, el ratón otra vez se fue y se puso a beber agua de la laguna y le dijo al zorro «esta laguna nos va a tragar. Tú tienes una barriga grande y yo una pequeña». De tanto tomar el zorro, se le salió el agua por el ano. Entonces se lo tapó con un marlo pero su barriga reventó y se murió. El ratón se alegró por la muerte del zorro y se fue lejos, hacia Ttio a comer papas. Aquí acaba.
Fuente: Cuentos en quechua de los niños de la Comunidad Campesina de Pampallacta (Provincia de Calca, Departamento de Cusco, Perú)

29 junio 2007

El maíz blanco gigante del Cusco

El cultivo de este maíz se ubica en el departamento del Cusco (Perú), entre las provincias de Calca y Urubamba, desde el distrito de San Salvador y hasta el centro poblado de Chilca en el distrito de Ollantaytambo, ocupando un largo tramo de aproximadamente 70 Km. de longitud a ambas márgenes del río Vilcanota o Willka mayu (río sagrado) a esta zona se le denomina Valle Sagrado de los Incas.
Se encuentra comprendido entre los paralelos 13°35´13” y 42°53´00” latitud sur y entre los meridianos 72°42´51” y 73° 21´12” de longitud oeste del meridiano de Greenwich. La altitud se encuentra entre los 2,600 y los 3,050 m.s.n.m, cuenta con una temperatura templada que favorece el cultivo de este y otros productos.
En el antiguo Perú, a este territorio se le conocía como “Qheswa”, que significa tierra templada de fondo de valle. El área de cultivo se desarrolla en las Provincias de Calca, distritos de: San Salvador, Písac, Taray, Coya, Lamay y Calca, y en la provincia de Urubamba, distritos de: Urubamba, Huayllabamba, Ollantaytambo, Yucay, y Maras.
La provincia cusqueña de Calca tiene siete distritos, en 6 de ellos se cultiva maíz blanco gigante Cusco. El séptimo distrito es Lares, que por su clima es diferente y tiene otras variedades de maíz.
De los siete distritos de Urubamba, en 5 de ellos se cultiva el maíz blanco gigante Cusco. En los otros dos que son Machupicchu y Chincheros no se produce esta variedad de maíz, pero sí otras.
ESTUDIO HISTÓRICO-CULTURAL
Este estudio buscó demostrar la presencia y antigüedad del maíz blanco gigante en diferentes periodos de tiempo, desde la época pre-inca hasta la actualidad, habiéndose mantenido desde entonces muchas prácticas culturales relacionadas con el proceso productivo y también muchas formas de uso y consumo.
La investigación permitió constatar la importancia de este producto en la economía y planificación del Imperio Incaico, así como su relevancia en la cosmogonía del poblador andino.
Ello se evidencia en todo el proceso productivo, a través de numerosos rituales y ceremonias que acompañan al cultivo, generándose todo un ambiente mágico religioso en torno a esta actividad. Para la investigación histórica se recurrió a fuentes orales y escritas, con el fin de conseguir y cotejar información que demuestre la presencia del cultivo a lo largo del tiempo.
Etimológicamente, el nombre “maíz blanco gigante” proviene del nombre quechua “paraqay sara”. “Sara” significa maíz en castellano, “paraqay” describe, además del color blanco, las características del grano: grande, harinoso y de contextura suave, de forma aplanada, alimento nutritivo que satisface el hambre.
Este nombre antiguo define de manera amplia las características del producto, lo que sumado al lugar geográfico de procedencia, contribuyó a la formación del nombre actual: maíz blanco gigante Cusco. Durante la época de los incas se pasó de una producción en pequeña escala y de granos pequeños, a una producción masiva y de mejor calidad, con el fin de proveer de alimentación al ejército y a la numerosa burocracia estatal afincada en distintas partes del territorio del gran Tahuantinsuyo.
El aumento de la producción también se dio como resultado de una mejor selección y cuidado de la calidad de las semillas, un mejor manejo en la distancia entre plantas y el constante control y deshierbe, así como por el empleo de técnicas de riego mediante andenes En este tiempo también se le empieza a denominar “paraqay sara” o maíz blanco gigante.
El Inca Garcilaso de la Vega nos refiere una evidencia de la presencia y consumo de este producto en la época incaica en el Libro Octavo de sus Comentarios Reales de los Incas, donde señala “Los frutos que el Perú tenía, de que se mantenía antes de los españoles, eran de diversas maneras, unos que se crían sobre la tierra y otros debajo de ella. De los frutos que se crían encima de la tierra tiene el primer lugar el grano que los mexicanos y los barloventanos llaman maíz, y los del Perú “zara”, porque es el pan que ellos tenían”.
Otra evidencia que demuestra la magnitud de este cultivo y su importancia en la alimentación de los antiguos peruanos puede apreciarse a través de las grandes obras de ingeniería hidráulica y de andenería que hasta ahora subsisten, las que sirvieron y sirven en la actualidad para el cultivo de este producto.
Posteriormente, Guamán Poma de Ayala, cronista que vivió en la época de la colonia, retrató a través de grabados un calendario agrícola de todo el proceso productivo en el imperio (12 meses), de los cuales 10 corresponden al maíz blanco gigante. Esta invalorable información nos ha permitido conocer y constatar cómo estos momentos productivos coinciden exactamente con el producto y las prácticas culturales que se desarrollan hasta la actualidad.
Además de esta evidencia, se ha encontrado en cerámicas y tallados de la cultura Pachachamac, representaciones de un maíz de ocho hileras, característica única del maíz blanco gigante Cusco.
Se ha encontrado testimonio de la presencia de este maíz a través de una representación hecha en madera tallada encontrada en el santuario de Pachacámac (400 a 900 D.C.). Allí se representa al dios Pachacámac con unas mazorcas de maíz atadas a la cintura, en que se puede apreciar, en la parte delantera, 4 mazorcas de 4 hileras cada una, Estas representan sólo la mitad de la mazorca, por lo que se trata de mazorcas de ocho hileras, lo que vendría a ser el paraqay sara o maíz blanco gigante. En este santuario también se ha encontrado una pintura mural en la cual se representa a una planta de maíz en producción.
ESTUDIO TÉCNICO-AGRONÓMICO
El equipo responsable de este estudio tuvo en cuenta el análisis de todos los elementos que conforman el medio natural en que se desarrolla el cultivo del maíz blanco gigante (agua, luz, suelos, presión atmosférica, humedad, horas de luz, etc.), para luego analizar cuáles de estos factores determinan las características que hacen destacable el producto.
El objetivo de este estudio fue probar que el maíz blanco gigante es resultado de la interacción de tres elementos: el material genético, el entorno físico y las prácticas culturales. Para ello la investigación buscó analizar la contribución de cada uno de estos elementos en la generación de las peculiaridades que definen al producto.
La metodología de investigación partió de la constatación de las diferencias existentes entre el maíz cultivado en el valle de Urubamba y el que se cultiva fuera de él, ya sea en el mismo Cusco (Andahuaylillas) o en otras regiones como el valle del Mantaro, usando semilla proveniente del Urubamba.
Se analizaron las diferencias fenotípicas (características biométricas y bioquímicas de su composición) del grano producido en el Urubamba, comparándolo con el que se produce en Quispicanchis (Huacarpay) y en el valle del Mantaro. Asimismo, se realizó una caracterización del entorno físico del valle de Urubamba, comparándolo con el valle del Mantaro.
Esta caracterización consideró dos niveles: uno general, a partir de descripciones regionales como las zonas de vida del mapa ecológico; y el segundo más específico, tomando en cuenta la colección de muestras de suelo y de agua y el análisis de la información meteorológica pertinente.
Paralelamente se realizó una caracterización del material genético, comparando muestras obtenidas en ambos valles en términos moleculares y poblacionales, con el objetivo de encontrar las afinidades entre ellas.
Finalmente, se realizó una encuesta en que se indagó por diferentes aspectos de las prácticas culturales que llevaban a cabo los productores cuyas semillas fueron analizadas. El estudio abarcó 21 lugares dentro del Valle de Urubamba, en los que se colectó muestras de suelo, agua y material genético y se encuestó a los productores involucrados.
Fuente: DENOMINACIÓN DE ORIGEN DE MAÍZ BLANCO GIGANTE publicado por COSUDE-Agencia Suiza para el Desarrollo y la cooperación- Programa PyMAGROS autores Dr. Oscar Inocente J. (COSUDE-PyMAGROS), Ing. Luis Sumar K. (APROMAIZ), Ing. Alejandrino Loaiza S. (Proyecto CORREDOR Puno - Cusco). Asesoría en la sistematización y redacción: Mariluz Morgan – Taller Permanente de Sistematización.