Algunos de los factores de la emigración de peruanos a los Estados Unidos
No existen cifras oficiales sobre el número de peruanos inmigrantes residiendo en los Estados Unidos. Se estima que la comunidad peruana asciende a más de millón de personas entre residentes legales e indocumentados. El incremento de la emigración peruana particularmente hacia los Estados Unidos; coincide con el conflicto armado producido entre 1980 a 2000 es el conflicto de mayor duración, impacto social y de mayor costo, tanto humano como económico, en la historia de Perú. El costo estimado en vidas humanas es aproximadamente 69,000 personas, entre muertos y desaparecidos. La causa del conflicto fue la decisión del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso de iniciar una guerra popular contra el Estado Peruano. Esta guerra se produjo en el momento en que la sociedad peruana iniciaba una transición democrática, luego de doce años de una dictadura militar. El Estado peruano no tuvo la capacidad para contener el avance de la subversión y los gobiernos civiles dejaron que el conflicto se militarice al dejar la conducción contrasubversiva en manos de las Fuerzas Armadas.
Otro factor a considerar fue la aparición del fenómeno del narcotráfico durante el mismo periodo. La magnitud de este y la respuesta de las Fuerzas Armadas provoco que la Zona del Alto Huallaga fuese uno de los mayores escenarios del conflicto armado. La distribución geográfica del conflicto, el cual se concentro en las zonas más pobres del Perú, provoco una sensación de exclusión e indiferencia. Las principales ciudades, en especial las de la costa, no estuvieron en el centro del conflicto. Fueron las zonas rurales y las más pobres las que tienen el mayor costo en vidas humanas, es decir son los sectores más pobres los más vulnerables a la violencia armada, el comienzo de la crisis económica y la violencia política que empieza en la década de 1980.
La inmigración peruana de fines de los años ochenta se debió a una serie de problemas que el estado peruano fue incapaz de resolver al finalizar la década de los ochenta. La inflación alcanzaba la exorbitante suma de 7,000 por ciento anual, la recaudación tributaria era de 4.7 por ciento del PIB y las acciones contrainsurgentes del Estado peruano e insurgentes del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) y del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso (SL) habían ocasionado más de 14 mil muertos y para 1994 más de 570 mil personas estaban en la condición de desplazados (Kahatt, 2002:455-456). El país devastado y enfrentado a la más importante crisis política y económica del siglo XX. Alberto Fujimori, sucesor de Alan García, dio un golpe de Estado en 1992. La dictadura que encabezó incrementó la represión a la oposición política, militarizó el país, inició una profunda fase de privatizaciones de las empresas estatales, implementó una serie de reformas en el Estado peruano (entre ellas, el cambio de la Constitución de 1979 por una nueva Carta Magna que redujo los derechos sociales y económicos, salud, vivienda y educación–) y dejó al gobierno peruano como un "promotor" de la ciudadanía pero sin un papel regulador y ejecutor real. La privatización de 187 empresas estatales (Aguilar, 2006), un proceso que concluyó en 1997 y generó una considerable pérdida de plazas de trabajo. Las privatizaciones de las empresas estatales, junto con las reformas institucionales, fueron una de las otras causas de la migración internacional peruana de los últimos 15 años. Es justamente cuando el deterioro económico empieza a manifestarse en el desempleo, sub empleo, violencia social y debilidad democrática; además, son los mismos parientes y amigos que emigraron anteriormente quienes se esmeran en estimular la emigración, incluyendo la ilegal. Los peruanos en el extranjero siempre mantuvieron estrechas relaciones con sus parientes, amigos, instituciones y con todo lo que ocurría en el Perú en general. Cuando empieza el deterioro económico y político estos lazos empezaron a ser movilizados más intensamente. La preferencia migratoria de los peruanos nos muestra a Estados Unidos como el destino migratorio. La década de los ochenta no solamente representa la restauración de la democracia representativa, sino el comienzo del fin de una emigración hacia los Estados Unidos. Los patrones de emigración que empezaron en 1980 caracterizados por la sustitución de la migración temporal y el retorno, relativamente en la década de los setenta, por la característica predominante de la década de los ochenta es la emigración permanente, la búsqueda de incorporarse a una sociedad que ofrece mejor bienestar económico, escapando del fuego cruzado de la violencia política y el deterioro económico. La emigración por mejores recursos y condiciones económicas. En este contexto político aparece el refugiado político peruano víctima del fuego cruzado de la violencia política, violación a los derechos civiles y políticos, la persecución por motivo de raza, lugar de nacimiento o residencia, afiliación política, asociación (sindicatos, organizaciones campesinas, organizaciones estudiantiles, organizaciones comunales, organizaciones de madres victima de la violencia política, organizaciones religiosas etc.) la persecución por la opción de género o preferencial sexual.
El refugiado no siempre está asociado a una organización política o social, en el caso peruano la persecución estaba predominada por el elemento raza (mestizos, cholos, indios, provincianos), opinión política, afiliación política-sindical y exclusión social. El reporte la Comisión de la Verdad señala "fueron las zonas rurales y las más pobres las que tienen el mayor costo de vidas humanas." "La distribución geográfica del conflicto, el cual se concentro en las zonas más pobres del Perú, provoco una sensación de exclusión e indiferencia." El racismo fue otro elemento en la persecución y las migraciones forzadas por las fuerzas armadas (formación de grupos armados: Colina, y otros escuadrones de la muerte organizados ilegalmente con fondos públicos), policiales del Perú y los grupos levantados en armas. (Sendero Luminoso PCP-SL y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) El racismo constituyo y aun sigue constituyendo un elemento en la busca forzada de la diáspora peruana de buscar refugio o asilo en los Estados Unidos por la persecución por motivo de raza y opinión política. La gran mayoría de las víctimas del conflicto armado en el Perú fueron ciudadanos de las comunidades andinas o selváticas y en otros hijos de las provincias, llamados despectivamente provincianos, indios o cholos. El prejuicio racial era el común denominador en el conflicto. El refugiado peruano se convierte en el asilado político que escapa de la persecución por motivos de raza, religión, afiliación política, género y/o opinión política. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos en el reporte sobre "Documentation for Peruvian Political Asylum Cases" revela que como resultado del conflicto armando entre 1987 a 1991, 811 peruanos solicitaron asilo político en los Estados Unidos. En 1992, se incremento la emigración de peruanos en busca de asilo político.
Otro factor a considerar fue la aparición del fenómeno del narcotráfico durante el mismo periodo. La magnitud de este y la respuesta de las Fuerzas Armadas provoco que la Zona del Alto Huallaga fuese uno de los mayores escenarios del conflicto armado. La distribución geográfica del conflicto, el cual se concentro en las zonas más pobres del Perú, provoco una sensación de exclusión e indiferencia. Las principales ciudades, en especial las de la costa, no estuvieron en el centro del conflicto. Fueron las zonas rurales y las más pobres las que tienen el mayor costo en vidas humanas, es decir son los sectores más pobres los más vulnerables a la violencia armada, el comienzo de la crisis económica y la violencia política que empieza en la década de 1980.
La inmigración peruana de fines de los años ochenta se debió a una serie de problemas que el estado peruano fue incapaz de resolver al finalizar la década de los ochenta. La inflación alcanzaba la exorbitante suma de 7,000 por ciento anual, la recaudación tributaria era de 4.7 por ciento del PIB y las acciones contrainsurgentes del Estado peruano e insurgentes del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) y del Partido Comunista del Perú-Sendero Luminoso (SL) habían ocasionado más de 14 mil muertos y para 1994 más de 570 mil personas estaban en la condición de desplazados (Kahatt, 2002:455-456). El país devastado y enfrentado a la más importante crisis política y económica del siglo XX. Alberto Fujimori, sucesor de Alan García, dio un golpe de Estado en 1992. La dictadura que encabezó incrementó la represión a la oposición política, militarizó el país, inició una profunda fase de privatizaciones de las empresas estatales, implementó una serie de reformas en el Estado peruano (entre ellas, el cambio de la Constitución de 1979 por una nueva Carta Magna que redujo los derechos sociales y económicos, salud, vivienda y educación–) y dejó al gobierno peruano como un "promotor" de la ciudadanía pero sin un papel regulador y ejecutor real. La privatización de 187 empresas estatales (Aguilar, 2006), un proceso que concluyó en 1997 y generó una considerable pérdida de plazas de trabajo. Las privatizaciones de las empresas estatales, junto con las reformas institucionales, fueron una de las otras causas de la migración internacional peruana de los últimos 15 años. Es justamente cuando el deterioro económico empieza a manifestarse en el desempleo, sub empleo, violencia social y debilidad democrática; además, son los mismos parientes y amigos que emigraron anteriormente quienes se esmeran en estimular la emigración, incluyendo la ilegal. Los peruanos en el extranjero siempre mantuvieron estrechas relaciones con sus parientes, amigos, instituciones y con todo lo que ocurría en el Perú en general. Cuando empieza el deterioro económico y político estos lazos empezaron a ser movilizados más intensamente. La preferencia migratoria de los peruanos nos muestra a Estados Unidos como el destino migratorio. La década de los ochenta no solamente representa la restauración de la democracia representativa, sino el comienzo del fin de una emigración hacia los Estados Unidos. Los patrones de emigración que empezaron en 1980 caracterizados por la sustitución de la migración temporal y el retorno, relativamente en la década de los setenta, por la característica predominante de la década de los ochenta es la emigración permanente, la búsqueda de incorporarse a una sociedad que ofrece mejor bienestar económico, escapando del fuego cruzado de la violencia política y el deterioro económico. La emigración por mejores recursos y condiciones económicas. En este contexto político aparece el refugiado político peruano víctima del fuego cruzado de la violencia política, violación a los derechos civiles y políticos, la persecución por motivo de raza, lugar de nacimiento o residencia, afiliación política, asociación (sindicatos, organizaciones campesinas, organizaciones estudiantiles, organizaciones comunales, organizaciones de madres victima de la violencia política, organizaciones religiosas etc.) la persecución por la opción de género o preferencial sexual.
El refugiado no siempre está asociado a una organización política o social, en el caso peruano la persecución estaba predominada por el elemento raza (mestizos, cholos, indios, provincianos), opinión política, afiliación política-sindical y exclusión social. El reporte la Comisión de la Verdad señala "fueron las zonas rurales y las más pobres las que tienen el mayor costo de vidas humanas." "La distribución geográfica del conflicto, el cual se concentro en las zonas más pobres del Perú, provoco una sensación de exclusión e indiferencia." El racismo fue otro elemento en la persecución y las migraciones forzadas por las fuerzas armadas (formación de grupos armados: Colina, y otros escuadrones de la muerte organizados ilegalmente con fondos públicos), policiales del Perú y los grupos levantados en armas. (Sendero Luminoso PCP-SL y el Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) El racismo constituyo y aun sigue constituyendo un elemento en la busca forzada de la diáspora peruana de buscar refugio o asilo en los Estados Unidos por la persecución por motivo de raza y opinión política. La gran mayoría de las víctimas del conflicto armado en el Perú fueron ciudadanos de las comunidades andinas o selváticas y en otros hijos de las provincias, llamados despectivamente provincianos, indios o cholos. El prejuicio racial era el común denominador en el conflicto. El refugiado peruano se convierte en el asilado político que escapa de la persecución por motivos de raza, religión, afiliación política, género y/o opinión política. El Departamento de Justicia de los Estados Unidos en el reporte sobre "Documentation for Peruvian Political Asylum Cases" revela que como resultado del conflicto armando entre 1987 a 1991, 811 peruanos solicitaron asilo político en los Estados Unidos. En 1992, se incremento la emigración de peruanos en busca de asilo político.
El derecho de asilo tiene una clara conexión con el reconocimiento y garantía de diversos derechos fundamentales, como son el derecho a la libertad de expresión, el derecho a la participación política, el derecho de asociación entre otros. Sin embargo hay cuatro derechos que están especialmente protegidos con esta garantía: El derecho a la vida, por cuanto que en muchos casos quien solicita asilo es persona que en el país del que procede, corre grave peligro de ser asesinada. El derecho a la integridad psico-física. Es frecuente que quien solicita asilo haya sido torturado en el país del que procede por fuerzas de "seguridad" del Estado o corra o haya corrido grave peligro de ser torturado. El derecho a la libertad ideológica y de pensamiento pues el asilo protege a perseguidos políticos, personas que tienen en peligro su vida o su libertad por razones de raza, etnia, religión, pertenencia a un grupo social determinado u opiniones o actividades políticas. El derecho a la seguridad personal, evitando torturas y malos tratos, así como la aplicación de penas crueles, inhumanas y degradantes. No hay que olvidar que la causa fundamental generadora de refugiados es la violación generalizada de los derechos humanos y la violencia política de los gobiernos: detenciones arbitrarias, torturas, "desapariciones", ejecuciones extrajudiciales.
El Servicio de Inmigración y Naturalización (INS) reporto en 1992, 1,135 peruanos solicitaron asilo político. Este nuevo elemento cambia la emigración tradicional peruana a los Estados Unidos. Ahora es un peruano forzado a buscar refugio y asilo político. ("Master of Exhibit on Peru; Peru a Decade of Violence. New York. J. Gonzales-Lara & P. Young, 1992). "La Sección 208 del Acta de inmigración y Naturalización provee que un extranjero que este físicamente presente en los Estados Unidos, o en una frontera o puerto de entrada, puede solicitar, y ser concedido, asilo, si el Abogado General determina que tal extranjero es un refugiado como definido bajo la ley."
El acta de inmigración define al refugiado como cualquier persona que este fuera de cualquier país de la nacionalidad de tal persona o, en el caso de una persona que no tiene nacionalidad, este fuera del país en el que tal persona residió habitualmente, y quién es incapaz o no quiere volver a, y es incapaz o no quiere usar de la protección de ese país debido a persecución o un miedo bien fundado de persecución por causa de raza, religión, nacionalidad, miembros de un grupo social particular, o la opinión política.
La composición étnica-racial y la ocupación de quienes solicitaron asilo político durante este periodo llego a representar a todas las sangres del Perú: blancos, mestizos de los barrios populares y sectores medios, mulatos, indígenas, campesinos, provincianos de las zonas de emergencia, provincianos residente en pueblos jóvenes, maestros, médicos, ingenieros, policías, empleadas domesticas, vendedores ambulantes, jueces, periodistas, pequeños empresarios y empresarios.
El concepto "diáspora" como vocablo vinculado con la "dispersión" de una población originaria de un mismo país y residente en otros ámbito geográficos, trae consigo una connotación de magnitud, en cuanto al caudal de personas que se desplazan fuera de las fronteras nativas y que conforman un grupo nacional o religioso en un nuevo espacio geográfico diferente del que vivieran habitualmente. Asimismo, el término "diáspora" connota a un grupo humano diferenciado del común nacional, ya sea por su carácter de foráneo, por su condición de minoría o de relativa pertenencia al medio que lo recepta, y vinculado, emocional y culturalmente con su tierra de origen. Por extensión, también creemos que el vocablo "diáspora" en contraposición a una mera cifra estadística migratoria, posee hoy en día un matiz conceptual en estrecha relación con el concepto de "institucionalidad" o de "organización asociativa" del grupo humano emigrado residente en el exterior y en la interrelación social, cultural, económica o política de éstos, con su país de origen.
El proceso migratorio de peruanos a los Estados Unidos, que va dar inicio la formación de enclaves culturales y sociales que abrirán paso la movilidad social de un nuevo grupo de emigrantes peruanos en los Estados Unidos. La diáspora peruana se ha caracterizado por su diversidad étnica y la diversidad de emigrantes de diversos extractos sociales de la sociedad peruana, (empresarios, pequeños empresarios, estudiantes, sub-empleados, profesionales (médicos, ingenieros, psicólogos, maestros, abogados). empleados públicos, policías, oficiales, madres solteras, trabajadores asalariados, campesinos, empleadas domesticas, trabajadores independientes, vendedores ambulantes etc. Contrario a la empírica impresión que solo las clases altas y medias emigrar del Perú hacia los países desarrollados.
La evolución de la emigración peruana a los Estados Unidos.
La emigración de peruanos a los Estados Unidos se remonta de los años 1930. La incertidumbre nacional (1930-1933) Para el 22 de agosto de 1930, desde la ciudad caudillo de Arequipa, el comandante Luis M. Sánchez Cerro y su guarnición militar levantaron su voz de protesta, a través de un manifiesto, contra un gobierno que por más de once años se caracterizó por su corrupción, tiranía, miseria moral, atropellos, etc. Como consecuencia, Leguía, entregó el mando a la Junta Militar del general María Ponce. El país entero avaló el levantamiento en Arequipa. Sánchez Cerro llegó a Lima. Sin embargo, el futuro de Leguía no era mejor que el de terminar sus día en una cárcel. Con la caída de Leguía y el surgimiento de Sánchez Cerro, se reinició un etapa de militarismo. Con la aparición del caudillismo militar de 1930 no sólo se cobraron venganzas y odios acumulados durante 11 años de arbitrariedades, sino que surgieron nuevas fuerzas y tendencias radicales. Desorientación política, efervescencia social y crisis económica fueron las notas dominantes en los agitados días que siguieron a la caída de Leguía. La junta presidida por Sánchez Cerro convocó a una Asamblea Constituyente, con la finalidad de elegir un presidente provisorio y dictar una nueva Constitución que reemplace a la de 1920. Sánchez Cerro renunció públicamente al alto cargo de la presidencia de la República debido a la agitación popular que produjeron sus ambiciones políticas a todas luces contrarias al espíritu del Manifiesto de Arequipa. Además de que el mando pasara por tres manos en un día (Sánchez Cerro, Holguín, Elías), aparecen Samanez Ocampo y el comandante Jiménez. Ambos convinieron en la formación de un Junta Nacional de Gobierno mediante la cual se convocarían elecciones democráticas para presidente de la República y la instalación de una Asamblea Constituyente. Víctor Raúl Haya de la Torre (APRA), Luis M. Sánchez Cerro (Unión Revolucionaria), fueron los dos principales candidatos a las elecciones programadas para el 11 de octubre de 1931. Mientras que el APRA con el PAP formuló su "programa mínimo" coherente a la realidad sociopolítica del país y Haya de la Torre pronunciaba vibrantes y enérgicos discursos por el interior del país, por su parte, la Unión Revolucionaria de Sánchez Cerro seguía una tendencia nacionalista con su lema: "El Perú ante todo". Las elecciones se realizaron en un ambiente de sosiego y asombroso orden, propio de una madurez cívica. Sánchez Cerro obtuvo la mayoría de votos, ganando largamente a Haya de la Torre, quien por sus partidarios fue nombrado, por razones obvias, "el presidente moral del Perú". Luego de establecido Sánchez Cerro en el poder, promulgó la Ley de Emergencia destinada a restablecer el orden interno y controlar los desmanes que el APRA promovía tanto en el Parlamento como en las calles. Se apresaron y deportaron apristas, se clausuraron sus locales y el periódico la Tribuna. Esta violencia generó más violencia, llegándose incluso al asesinato de Sánchez Cerro, luego de 16 meses de gobierno, por parte de un joven aprista.
El Servicio de Inmigración y Naturalización (INS) reporto en 1992, 1,135 peruanos solicitaron asilo político. Este nuevo elemento cambia la emigración tradicional peruana a los Estados Unidos. Ahora es un peruano forzado a buscar refugio y asilo político. ("Master of Exhibit on Peru; Peru a Decade of Violence. New York. J. Gonzales-Lara & P. Young, 1992). "La Sección 208 del Acta de inmigración y Naturalización provee que un extranjero que este físicamente presente en los Estados Unidos, o en una frontera o puerto de entrada, puede solicitar, y ser concedido, asilo, si el Abogado General determina que tal extranjero es un refugiado como definido bajo la ley."
El acta de inmigración define al refugiado como cualquier persona que este fuera de cualquier país de la nacionalidad de tal persona o, en el caso de una persona que no tiene nacionalidad, este fuera del país en el que tal persona residió habitualmente, y quién es incapaz o no quiere volver a, y es incapaz o no quiere usar de la protección de ese país debido a persecución o un miedo bien fundado de persecución por causa de raza, religión, nacionalidad, miembros de un grupo social particular, o la opinión política.
La composición étnica-racial y la ocupación de quienes solicitaron asilo político durante este periodo llego a representar a todas las sangres del Perú: blancos, mestizos de los barrios populares y sectores medios, mulatos, indígenas, campesinos, provincianos de las zonas de emergencia, provincianos residente en pueblos jóvenes, maestros, médicos, ingenieros, policías, empleadas domesticas, vendedores ambulantes, jueces, periodistas, pequeños empresarios y empresarios.
El concepto "diáspora" como vocablo vinculado con la "dispersión" de una población originaria de un mismo país y residente en otros ámbito geográficos, trae consigo una connotación de magnitud, en cuanto al caudal de personas que se desplazan fuera de las fronteras nativas y que conforman un grupo nacional o religioso en un nuevo espacio geográfico diferente del que vivieran habitualmente. Asimismo, el término "diáspora" connota a un grupo humano diferenciado del común nacional, ya sea por su carácter de foráneo, por su condición de minoría o de relativa pertenencia al medio que lo recepta, y vinculado, emocional y culturalmente con su tierra de origen. Por extensión, también creemos que el vocablo "diáspora" en contraposición a una mera cifra estadística migratoria, posee hoy en día un matiz conceptual en estrecha relación con el concepto de "institucionalidad" o de "organización asociativa" del grupo humano emigrado residente en el exterior y en la interrelación social, cultural, económica o política de éstos, con su país de origen.
El proceso migratorio de peruanos a los Estados Unidos, que va dar inicio la formación de enclaves culturales y sociales que abrirán paso la movilidad social de un nuevo grupo de emigrantes peruanos en los Estados Unidos. La diáspora peruana se ha caracterizado por su diversidad étnica y la diversidad de emigrantes de diversos extractos sociales de la sociedad peruana, (empresarios, pequeños empresarios, estudiantes, sub-empleados, profesionales (médicos, ingenieros, psicólogos, maestros, abogados). empleados públicos, policías, oficiales, madres solteras, trabajadores asalariados, campesinos, empleadas domesticas, trabajadores independientes, vendedores ambulantes etc. Contrario a la empírica impresión que solo las clases altas y medias emigrar del Perú hacia los países desarrollados.
La evolución de la emigración peruana a los Estados Unidos.
La emigración de peruanos a los Estados Unidos se remonta de los años 1930. La incertidumbre nacional (1930-1933) Para el 22 de agosto de 1930, desde la ciudad caudillo de Arequipa, el comandante Luis M. Sánchez Cerro y su guarnición militar levantaron su voz de protesta, a través de un manifiesto, contra un gobierno que por más de once años se caracterizó por su corrupción, tiranía, miseria moral, atropellos, etc. Como consecuencia, Leguía, entregó el mando a la Junta Militar del general María Ponce. El país entero avaló el levantamiento en Arequipa. Sánchez Cerro llegó a Lima. Sin embargo, el futuro de Leguía no era mejor que el de terminar sus día en una cárcel. Con la caída de Leguía y el surgimiento de Sánchez Cerro, se reinició un etapa de militarismo. Con la aparición del caudillismo militar de 1930 no sólo se cobraron venganzas y odios acumulados durante 11 años de arbitrariedades, sino que surgieron nuevas fuerzas y tendencias radicales. Desorientación política, efervescencia social y crisis económica fueron las notas dominantes en los agitados días que siguieron a la caída de Leguía. La junta presidida por Sánchez Cerro convocó a una Asamblea Constituyente, con la finalidad de elegir un presidente provisorio y dictar una nueva Constitución que reemplace a la de 1920. Sánchez Cerro renunció públicamente al alto cargo de la presidencia de la República debido a la agitación popular que produjeron sus ambiciones políticas a todas luces contrarias al espíritu del Manifiesto de Arequipa. Además de que el mando pasara por tres manos en un día (Sánchez Cerro, Holguín, Elías), aparecen Samanez Ocampo y el comandante Jiménez. Ambos convinieron en la formación de un Junta Nacional de Gobierno mediante la cual se convocarían elecciones democráticas para presidente de la República y la instalación de una Asamblea Constituyente. Víctor Raúl Haya de la Torre (APRA), Luis M. Sánchez Cerro (Unión Revolucionaria), fueron los dos principales candidatos a las elecciones programadas para el 11 de octubre de 1931. Mientras que el APRA con el PAP formuló su "programa mínimo" coherente a la realidad sociopolítica del país y Haya de la Torre pronunciaba vibrantes y enérgicos discursos por el interior del país, por su parte, la Unión Revolucionaria de Sánchez Cerro seguía una tendencia nacionalista con su lema: "El Perú ante todo". Las elecciones se realizaron en un ambiente de sosiego y asombroso orden, propio de una madurez cívica. Sánchez Cerro obtuvo la mayoría de votos, ganando largamente a Haya de la Torre, quien por sus partidarios fue nombrado, por razones obvias, "el presidente moral del Perú". Luego de establecido Sánchez Cerro en el poder, promulgó la Ley de Emergencia destinada a restablecer el orden interno y controlar los desmanes que el APRA promovía tanto en el Parlamento como en las calles. Se apresaron y deportaron apristas, se clausuraron sus locales y el periódico la Tribuna. Esta violencia generó más violencia, llegándose incluso al asesinato de Sánchez Cerro, luego de 16 meses de gobierno, por parte de un joven aprista.
Coincidiendo con la incertidumbre nacional y el levantamiento militar de Sánchez Cerro a la dictadura militar de Augusto Leguía y la crisis política de la época de los años 30. El Oncenio de Leguía se caracterizo por la liquidación total y definitiva de los partidos políticos, la persecución implacable de los opositores políticos, el establecimiento de un régimen personalista, fuerte y tiránico, la destrucción total del Estado de derecho amparado en la defensa del orden público, el sometimiento y la mediatización de diversas instituciones a los caprichos del Ejecutivo, la corrupción administrativa. Anterior a este periodo no existe información registrada de la emigración de peruanos a los Estados Unidos. El reporte del Department de Homeland Security reporto que entre el periodo de 1930 a 1939 fueron admitidos como residentes legales 321 peruanos; entre el periodo de 1940 a 1949, 1,273 residentes legales, entre el periodo de 1950 a 1959, 5,980 residentes legales. En la fase de 1960 a 1969 se produjo un crecimiento de la emigración legal de peruanos a los Estados Unidos; durante este periodo, 19,783 peruanos fueron admitidos como residentes. En esta etapa, la clase media: profesionales, liberales, medianos empresarios y estudiantes se dirigen a los Estado Unidos que estaba en expansión económica. Es en este periodo se produce un cambio en los flujos netos de migración. El Perú pasa de ser un país de inmigrantes, a un de emigrantes. En la fase de 1970 a 1979, este periodo está marcado por los gobiernos militares, tanto de Velasco en la primera mitad, como de Morales Bermúdez en la segunda. Durante estos años se amplió el rango de destinos a los Estados Unidos de muchos profesionales y trabajadores especializados. El reporte indica que entre el periodo de 1970 a 1979, 25,311 peruanos emigraron legalmente como residentes legales.
En la fase de 1980 a 1989 este periodo está marcado por la vuelta a la democracia, el inicio del terrorismo y una crisis económica severa, sobre todo en la segunda mitad. Es predominantemente la clase media la que emigra en grandes cantidades. Es por primera vez que los Estados Unidos reciben en particular a grupos de refugiados políticos y trabajadores manuales, Por otro lado, los países de América Central empiezan a recibir peruanos como trabajadores profesionales calificados y no calificados; éstos últimos, con el objetivo de llegar a los Estados Unidos, cruzando el rio bravo. Adicionalmente, Canadá siguió recibiendo trabajadores manuales y profesionales. Es en esta década cuando las mujeres se incorporan plenamente a la emigración, en gran medida desde zonas rurales y ciudades pequeñas de la sierra y la costa. Este periodo está marcado, por un aumento de la emigración de peruanos y peruanas a los Estados Unidos. Para 1992, había 1‟500,000 peruanos en el extranjero. En este periodo de 1980 a 1989, 49,948 peruanos ingresaron legalmente como residentes legales a los Estados Unidos.
En el periodo de 1990 a 1999, y a inicios de 1992 se capturó a Abimael Guzmán, líder de Sendero Luminoso. El Perú empezó a salir de la recesión económica, aunque se sufrió una recaída con la crisis asiática y los demás efectos ligados a ésta. La emigración se convirtió en una opción para todas las clases sociales del Perú, incluyendo los pobres del campo y las ciudades y los nativos de la Amazonía y regiones Andinas del Perú. Durante este periodo de 1990 a 1999, 110,117 peruanos ingresaron a los Estados Unidos como residentes legales. Durante el periodo de 2000 a 2007 la emigración legal de peruanos ha continuado de manera continua y creciente de forma legal e ilegalmente. En el 2000, 9,361 peruanos, en el 2001, 10,838; en el 2002, 11,737; en el 2003, 9,169; en el 2004, 11,369; en el 2005, 15,206; en el 2006, 21,300 y en el 2007, 17,056 peruanos habían sido admitidos como residente legales, lo que representara una presencia en más de 27 estados especialmente, en la Florida, New Jersey, New York, Virginia y Washington. De acuerdo a un reporte del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú, en el 2003 la principal colonia de peruanos se encontraba en los Estados Unidos en donde residen 878,501 peruanos legales e indocumentados. El reporte del Servicios de Inmigración, revelo que dentro el periodo de 1830 a 2007, 378, 778 peruanos se establecieron legalmente en los Estados Unidos; comparado con el ingreso de turistas peruanos, en el periodo de 1996 a 2005 de 2’886,552 turistas peruanos, no existe información de retorno al país de origen, la emigración peruana de la fase 1990 a 2006 se ha caracterizado por establecerse en la diáspora; y a través de las remezas de dinero crear el puente a la reunificación familiar en la diáspora, y emigrar a la familia legalmente o ilegalmente. La evolución de la emigración peruana a los Estados Unidos durante 1985 a 1988 fue de 45,095 de ellos 20,097 hombres y 24,998 mujeres, y desde 1985 hasta julio de 1990, 55,302 emigrantes peruanos en los Estados Unidos. El reporte Perú Estadísticas de migración internacional de peruanos 1990-2005 del Instituto Nacional de Estadísticas del Perú (INEI) señala que entre 1990 a 2005, 514,491 peruanos emigraron los Estados Unidos, ellos 248,500 hombres y 265, 991 mujeres. En este proceso migratorio las mujeres han sido la vanguardia para establecer el puente entre de entra a la reunificación de la familia en el exterior; el envió de remezas para garantizar la sobrevivencia y la salida de quien dejo en el país natal.
La emigración de peruanos y peruanas se incremento hacia los Estados Unidos. Entre 1996 a 2005 fueron admitidos como turistas 2‟886,552 peruanos. En 1996, 166,050 peruanos fueron admitidos legalmente en calidad de turistas (I-94). En 1998, la emigración de peruanos como turista (I-94) alcanzo a 192,849; En 1999 fueron admitidos en condición de turistas 192,289; en el 2000 fueron admitidos 226,122; en el 2001 fueron admitidos 232,881; en el 2002 fueron admitidos 225,158 peruanos en calidad de turistas; en el 2003, 225,158 peruanos; en el 2004, 219,764 peruanos y en el 2005 fueron admitidos 216,145 peruanos con visas de turistas. La admisión usualmente es de 6 meses luego de este periodo el emigrante admitido como turista debe retornar a su país de origen. El crecimiento de la emigración a los Estados Unidos ha sido continuo y constante. No existe información sobre el numero de peruanos y peruanas que retornaron al país de origen después de terminado el periodo de la visa de turista. Diversos estudios sobre indocumentados indica que solo retornar a su país de origen un 20% o 25% de los emigrantes admitidos como turista, después de este periodo pasan a constituir parte de los millones de indocumentados. En el caso de los peruanos se estima que 15% a 20% retornar al Perú.
En el reporte Estadísticas de migración internacional de peruanos 1990-2007,(INEI), revela que entre 1990 a 2007 seguía siendo los Estados Unidos el país de mas atracción de la emigración de peruanos, durante este periodo emigraron 292,164 mujeres y 301,201 hombres, y se incrementaron los envíos de remezas, además se produce un cambio en la composición migratoria por región, la tradicionalmente limeña por el lugar de residencia, se extiende a los departamentos al interior del Perú: Tacna, Arequipa, Puno, Piura y Trujillo además de las regiones andinas y la selva peruana. Tenemos una emigración de todas las regiones del Perú, se manifiesta en la diversidad de las organizaciones, asociaciones e instituciones de la diáspora peruana en los Estados Unidos.
En la fase de 1980 a 1989 este periodo está marcado por la vuelta a la democracia, el inicio del terrorismo y una crisis económica severa, sobre todo en la segunda mitad. Es predominantemente la clase media la que emigra en grandes cantidades. Es por primera vez que los Estados Unidos reciben en particular a grupos de refugiados políticos y trabajadores manuales, Por otro lado, los países de América Central empiezan a recibir peruanos como trabajadores profesionales calificados y no calificados; éstos últimos, con el objetivo de llegar a los Estados Unidos, cruzando el rio bravo. Adicionalmente, Canadá siguió recibiendo trabajadores manuales y profesionales. Es en esta década cuando las mujeres se incorporan plenamente a la emigración, en gran medida desde zonas rurales y ciudades pequeñas de la sierra y la costa. Este periodo está marcado, por un aumento de la emigración de peruanos y peruanas a los Estados Unidos. Para 1992, había 1‟500,000 peruanos en el extranjero. En este periodo de 1980 a 1989, 49,948 peruanos ingresaron legalmente como residentes legales a los Estados Unidos.
En el periodo de 1990 a 1999, y a inicios de 1992 se capturó a Abimael Guzmán, líder de Sendero Luminoso. El Perú empezó a salir de la recesión económica, aunque se sufrió una recaída con la crisis asiática y los demás efectos ligados a ésta. La emigración se convirtió en una opción para todas las clases sociales del Perú, incluyendo los pobres del campo y las ciudades y los nativos de la Amazonía y regiones Andinas del Perú. Durante este periodo de 1990 a 1999, 110,117 peruanos ingresaron a los Estados Unidos como residentes legales. Durante el periodo de 2000 a 2007 la emigración legal de peruanos ha continuado de manera continua y creciente de forma legal e ilegalmente. En el 2000, 9,361 peruanos, en el 2001, 10,838; en el 2002, 11,737; en el 2003, 9,169; en el 2004, 11,369; en el 2005, 15,206; en el 2006, 21,300 y en el 2007, 17,056 peruanos habían sido admitidos como residente legales, lo que representara una presencia en más de 27 estados especialmente, en la Florida, New Jersey, New York, Virginia y Washington. De acuerdo a un reporte del Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú, en el 2003 la principal colonia de peruanos se encontraba en los Estados Unidos en donde residen 878,501 peruanos legales e indocumentados. El reporte del Servicios de Inmigración, revelo que dentro el periodo de 1830 a 2007, 378, 778 peruanos se establecieron legalmente en los Estados Unidos; comparado con el ingreso de turistas peruanos, en el periodo de 1996 a 2005 de 2’886,552 turistas peruanos, no existe información de retorno al país de origen, la emigración peruana de la fase 1990 a 2006 se ha caracterizado por establecerse en la diáspora; y a través de las remezas de dinero crear el puente a la reunificación familiar en la diáspora, y emigrar a la familia legalmente o ilegalmente. La evolución de la emigración peruana a los Estados Unidos durante 1985 a 1988 fue de 45,095 de ellos 20,097 hombres y 24,998 mujeres, y desde 1985 hasta julio de 1990, 55,302 emigrantes peruanos en los Estados Unidos. El reporte Perú Estadísticas de migración internacional de peruanos 1990-2005 del Instituto Nacional de Estadísticas del Perú (INEI) señala que entre 1990 a 2005, 514,491 peruanos emigraron los Estados Unidos, ellos 248,500 hombres y 265, 991 mujeres. En este proceso migratorio las mujeres han sido la vanguardia para establecer el puente entre de entra a la reunificación de la familia en el exterior; el envió de remezas para garantizar la sobrevivencia y la salida de quien dejo en el país natal.
La emigración de peruanos y peruanas se incremento hacia los Estados Unidos. Entre 1996 a 2005 fueron admitidos como turistas 2‟886,552 peruanos. En 1996, 166,050 peruanos fueron admitidos legalmente en calidad de turistas (I-94). En 1998, la emigración de peruanos como turista (I-94) alcanzo a 192,849; En 1999 fueron admitidos en condición de turistas 192,289; en el 2000 fueron admitidos 226,122; en el 2001 fueron admitidos 232,881; en el 2002 fueron admitidos 225,158 peruanos en calidad de turistas; en el 2003, 225,158 peruanos; en el 2004, 219,764 peruanos y en el 2005 fueron admitidos 216,145 peruanos con visas de turistas. La admisión usualmente es de 6 meses luego de este periodo el emigrante admitido como turista debe retornar a su país de origen. El crecimiento de la emigración a los Estados Unidos ha sido continuo y constante. No existe información sobre el numero de peruanos y peruanas que retornaron al país de origen después de terminado el periodo de la visa de turista. Diversos estudios sobre indocumentados indica que solo retornar a su país de origen un 20% o 25% de los emigrantes admitidos como turista, después de este periodo pasan a constituir parte de los millones de indocumentados. En el caso de los peruanos se estima que 15% a 20% retornar al Perú.
En el reporte Estadísticas de migración internacional de peruanos 1990-2007,(INEI), revela que entre 1990 a 2007 seguía siendo los Estados Unidos el país de mas atracción de la emigración de peruanos, durante este periodo emigraron 292,164 mujeres y 301,201 hombres, y se incrementaron los envíos de remezas, además se produce un cambio en la composición migratoria por región, la tradicionalmente limeña por el lugar de residencia, se extiende a los departamentos al interior del Perú: Tacna, Arequipa, Puno, Piura y Trujillo además de las regiones andinas y la selva peruana. Tenemos una emigración de todas las regiones del Perú, se manifiesta en la diversidad de las organizaciones, asociaciones e instituciones de la diáspora peruana en los Estados Unidos.
Transmigrantes y los enclaves socio-culturales peruanos en los Estados Unidos.
El Transmigrante es demasiado dependiente de su Estado-nación de origen y del de su país de acogida para volverse autónomo y creador como el que sufre una diáspora. El grupo social del cual forma parte se limita muy frecuentemente a su comunidad de origen y a la red transnacional de sus migrantes, mientras que el "ser de la diáspora" tiene el sentimiento de pertenecer a una nación en exilio dispersa a escala mundial, de ser portador de un ideal.
El transnacionalismo es una perspectiva teórica que se empezó a desarrollaren la década de los noventa con los trabajos de investigadores como Glick-Schiller, Bach y Szantón-Blanc en 1992 (Mendoza, 2003), quienes lo definen como el proceso por el que los inmigrantes desarrollan campos sociales que conectan su país de origen con su país de residencia. Los inmigrantes que desarrollan tales campos sociales son designados "Transmigrantes". Los Transmigrantes elaboran, activan y mantienen múltiples relaciones familiares, económicas, sociales, organizacionales, religiosas y políticas a través de las fronteras. Para ello utilizan redes sociales que los conectan con dos o más sociedades simultáneamente. Otros autores sostienen quela noción de transnacionalismo designa un área de investigación acotada y delimitada por "ocupaciones y actividades que requieren de contactos sociales habituales y sostenidos a través de las fronteras nacionales para su ejecución" (Portes, Guarnizo y Landolt, 2003:16); los principios básicos de esta noción son la regularidad de estos movimientos y la intensidad de los intercambios de distintos objetos y mercancías entre los inmigrantes y ciudadanos residentes en los países expulsores y receptores, lo que genera nuevas formas de transacciones culturales, económicas, sociales, políticas, y una multiplicidad de actividades que traspasan las fronteras nacionales
Los enclaves socio-culturales son las organizaciones peruanas constituidas en los diversos estados y/o condados de los Estados Unidos donde existe una mayor concentración de peruanos. Existen registrado 241 organizaciones que la definiremos: enclave socio-culturales que han venido sirviendo para la movilidad social de los peruanos y peruanas, además son centro de acopio de información : trabajo, como obtener información sobre los servicios sociales para los inmigrantes legales o indocumentados, son a su vez de enlaces de solidaridad entre diferentes generaciones de inmigrantes, especialmente a quienes las barreras del lenguaje a reducidos sus posibilidades en el proceso de integración también vale decir un vehículo que preserva la identidad y el nacionalismo peruano, centro de intercambio de información, centro de información para negocios comerciales. Es en estos enclaves socio-culturales donde el emigrante peruano y peruana empieza a conocer el funcionamiento de la sociedad norteamericana y como enfrentar estos nuevos retos en la sociedad con una diversidad cultural y étnica. Los enclaves socio-político-étnicos-culturales definen a los emigrantes de primera y segunda generación como Transmigrantes9. Transmigrante es aquél migrante que puede (Portes, Guarnizo y Landolt, 2003:18-19). Sin embargo, tenemos varios problemas en estas definiciones de lo transnacional, ¿por qué?: Primero, porque define como su eje de análisis las "actividades transnacionales", pero no explica cómo se producen. En segundo lugar, porque se enfocan en la regularidad de los movimientos que realizan los inmigrantes entre dos o más comunidades políticas, pero no explican los factores que producen y dan sentido a dichas actividades. Y se habla de remesas, viajes de negocios, actividades religiosas, cabildeos antelas autoridades de los estados de origen y de recepción, pero no se construyen argumentos que expliquen la producción de esas actividades. Otra debilidad de los argumentos planteados en torno al transnacionalismo consiste en la ausencia de un dispositivo teórico que permita relacionar las actividades políticas de los inmigrantes con relación a los estados de residencia y de origen. En este sentido es útil la propuesta de Faist (1999), quien propone el concepto de espacios sociales transnacionales, entendidos como el resultado de combinaciones de vínculos sociales y simbólicos, redes de organizaciones, posiciones de redes y organizaciones que se encuentran ubicadas en dos lugares localizados en contextos geográficos y políticos distintos. Estos espacios pueden ser tipificados a partir de dos indicadores: la intensidad de las redes y el tiempo que llevan funcionando.
Participar activamente en la vida económica, social, y política del país de origen y del de destino, al mismo tiempo. Es decir, no todos los migrantes peruanos son Transmigrantes. El fenómeno de transmigración es eminentemente uno de primera y segunda generación, porque, para la tercera generación, los individuos se asimilan más a la cultura del país de destino que a la del de origen y pierden el interés en interactuar en esa última sociedad. A diferencia de la asimilación cultural es la manera como se señala al proceso de integración de un grupo etnos-cultural tal como los inmigrantes, grupos étnicos minoritarios y otros dentro de lo que se tiene establecido como lo común a una comunidad mayor o dominante. La presunción de que dichos elementos generales son la garantía de la convivencia cultural dentro de un estado o territorio, es la que motiva el inicio de dicho proceso. En este proceso, el grupo que es absorbido y pierde por lo general su originalidad de manera parcial o total como sus maneras de hablar, su dialecto, sus peculiaridades en el habla, sus modos de ser y otros elementos de su identidad cultural cuando entra en contacto con la sociedad o cultura dominante.
El otro aspecto de asimilación10 cultural se da con la llegada de los inmigrantes y refugiados a otras naciones. El proceso puede ser complejo, porque no siempre estos grupos de personas desean asimilarse al país en donde se encuentran, sino que muchos prefieren defender la cultura propia de sus lugares de origen, aspecto que puede traerles dificultades como marginación y el rechazo. Otros realizan el proceso de asimilación de manera parcial y pragmática, es decir, asumen los elementos culturales dominantes en sociedad y conservan sus manifestaciones propias en el ámbito íntimo. Otros en cambio se muestran completamente abiertos a asumir la cultura que los acoge y olvidan con frecuencia sus orígenes llegando incluso a renegar de ellos. Lógicamente los niños son los más abiertos a la asimilación cultural.
La asimilación es también el estado de cambio. Esto ocurre por lo general con los inmigrantes. Cuando nuevos inmigrantes llegan al país, las personas que los rodean tratan de cambiarlos en lo que esa sociedad espera que ellos sean. Tarde o temprano los inmigrantes dejan de lado ciertas prácticas que les identificaban con su propia cultura y se vuelven algo similar a todos los demás a causa de la asimilación. La asimilación ocurre también en los casos de colonización.
En la época contemporánea, el tema de la asimilación cultural de los inmigrantes es común en países industrializados en donde llegan cientos de inmigrantes de países en vías de desarrollo que no sólo se constituyen en una fuerza de trabajo, sino que traen consigo sus propias manifestaciones culturales y lenguas. El elemento cultural que resulta más conflictivo es sin duda el de la religión al cual los grupos humanos se aferran con mayor fidelidad.
El surgimiento de los enclaves socio-culturales, son un mecanismo de mantenimiento y continuidad de las asociaciones de migrantes, constituye tanto un ámbito como un mecanismo de preservación de la identidad". (Güemes, 1984, 132). Hasta aquí la cita de lo que es un enclave, y que nos permitirá entonces, comprender los mecanismos de reproducción social de la identidad en los entornos urbanos por parte de los emigrantes peruanos en los Estados Unidos. En estos casos, la identidad se mantiene en los enclaves a partir de formas de organización grupal que generan empatía entre los actores, creando lazos y compromisos sociales recíprocos al interior de los enclaves de solidaridad con el país de origen; generando a su vez, diferenciación social hacia el exterior. Esto permite que definan las fronteras grupales o límites simbólicos de la acción social colectivamente reconocida. Las instituciones sociales del enclave tienen como finalidad el mantenimiento del estilo histórico-cultural común, que al contacto con la nueva sociedad, y la nueva matriz de identidad o nuevo estilo cultural. Se mantienen las instituciones, se adoptan nuevos valores, se mantiene el principio básico de la solidaridad mecánica ya que sirve de cemento invisible para cohesionar al grupo, permitiendo el auto adscripción. Sin embargo, las valoraciones personales sobre ciertos rasgos culturales cambian, se adoptan elementos de la cultura determinante del stablishment y se van asimilando elementos ideológicos del stablishment, a las formas de conducta individual y de acción social sobre todo hacia el exterior.
En el caso de los inmigrantes peruanos podemos observar una dicotomía en el proceso de asimilación cultural de manera parcial es decir asumen elementos de la cultura dominantes pero a la vez conservan sus manifestaciones propias en el ámbito intimo de la comunidad, una expresión son los enclaves socio-culturales a través de las diversidad de organizaciones peruanas: organizaciones asistenciales de ayuda a Perú, organizaciones religiosas, organizaciones deportivas, organizaciones étnico culturales, organizaciones folklóricas, entre otras. Los grupos étnico o etnia: con este nombre se designa a un grupo humano que posee rasgos físicos y biológicos similares, además de compartir tradiciones históricas, lengua, cultura, creencias y valores, es decir, un grupo que forma una comunidad socio-cultural forjada históricamente. Las etnias poseen un árbol genealógico evolutivo común, y se asientan sobre relaciones de parentesco y de herencia que se remontan hacia lejanas épocas del pasado. No hay que confundirla con el concepto de "raza", ya que éste designa la existencia de unos rasgos genéticos que son comunes y exclusivos de un grupo humano. Sin embargo, dentro de cada raza existen numerosas etnias, ya que muchos de los grupos humanos que constituyen una raza han tenido una experiencia histórica y cultural exclusiva, diferente de otras experiencias vividas por el resto de los grupos.
Los enclaves étnicos son grupos de hablantes de una misma lengua que pueden tener una o todas las características siguientes: formar grupos compactos y aislados del resto de la población, localizados en asentamientos cercanos o en la misma colonia, barrio o vecindad; trabajar en las mismas actividades; recrear muchas de sus pautas culturales en sus nuevos asentamientos, tales como el vestido, la lengua, formas de vida, de alimentación, etc.; mantener vínculos con sus comunidades de origen que pueden ser de diferente índole: visitas periódicas a la comunidad y participación en las fiestas, aportación de dinero para mejoras en el pueblo, mantenimiento de su casa o tierras y para bautizar a sus hijos en la comunidad, y hasta tener formas organizativas formales de vinculación que les permite incidir en la vida comunitaria.
El Transmigrante es demasiado dependiente de su Estado-nación de origen y del de su país de acogida para volverse autónomo y creador como el que sufre una diáspora. El grupo social del cual forma parte se limita muy frecuentemente a su comunidad de origen y a la red transnacional de sus migrantes, mientras que el "ser de la diáspora" tiene el sentimiento de pertenecer a una nación en exilio dispersa a escala mundial, de ser portador de un ideal.
El transnacionalismo es una perspectiva teórica que se empezó a desarrollaren la década de los noventa con los trabajos de investigadores como Glick-Schiller, Bach y Szantón-Blanc en 1992 (Mendoza, 2003), quienes lo definen como el proceso por el que los inmigrantes desarrollan campos sociales que conectan su país de origen con su país de residencia. Los inmigrantes que desarrollan tales campos sociales son designados "Transmigrantes". Los Transmigrantes elaboran, activan y mantienen múltiples relaciones familiares, económicas, sociales, organizacionales, religiosas y políticas a través de las fronteras. Para ello utilizan redes sociales que los conectan con dos o más sociedades simultáneamente. Otros autores sostienen quela noción de transnacionalismo designa un área de investigación acotada y delimitada por "ocupaciones y actividades que requieren de contactos sociales habituales y sostenidos a través de las fronteras nacionales para su ejecución" (Portes, Guarnizo y Landolt, 2003:16); los principios básicos de esta noción son la regularidad de estos movimientos y la intensidad de los intercambios de distintos objetos y mercancías entre los inmigrantes y ciudadanos residentes en los países expulsores y receptores, lo que genera nuevas formas de transacciones culturales, económicas, sociales, políticas, y una multiplicidad de actividades que traspasan las fronteras nacionales
Los enclaves socio-culturales son las organizaciones peruanas constituidas en los diversos estados y/o condados de los Estados Unidos donde existe una mayor concentración de peruanos. Existen registrado 241 organizaciones que la definiremos: enclave socio-culturales que han venido sirviendo para la movilidad social de los peruanos y peruanas, además son centro de acopio de información : trabajo, como obtener información sobre los servicios sociales para los inmigrantes legales o indocumentados, son a su vez de enlaces de solidaridad entre diferentes generaciones de inmigrantes, especialmente a quienes las barreras del lenguaje a reducidos sus posibilidades en el proceso de integración también vale decir un vehículo que preserva la identidad y el nacionalismo peruano, centro de intercambio de información, centro de información para negocios comerciales. Es en estos enclaves socio-culturales donde el emigrante peruano y peruana empieza a conocer el funcionamiento de la sociedad norteamericana y como enfrentar estos nuevos retos en la sociedad con una diversidad cultural y étnica. Los enclaves socio-político-étnicos-culturales definen a los emigrantes de primera y segunda generación como Transmigrantes9. Transmigrante es aquél migrante que puede (Portes, Guarnizo y Landolt, 2003:18-19). Sin embargo, tenemos varios problemas en estas definiciones de lo transnacional, ¿por qué?: Primero, porque define como su eje de análisis las "actividades transnacionales", pero no explica cómo se producen. En segundo lugar, porque se enfocan en la regularidad de los movimientos que realizan los inmigrantes entre dos o más comunidades políticas, pero no explican los factores que producen y dan sentido a dichas actividades. Y se habla de remesas, viajes de negocios, actividades religiosas, cabildeos antelas autoridades de los estados de origen y de recepción, pero no se construyen argumentos que expliquen la producción de esas actividades. Otra debilidad de los argumentos planteados en torno al transnacionalismo consiste en la ausencia de un dispositivo teórico que permita relacionar las actividades políticas de los inmigrantes con relación a los estados de residencia y de origen. En este sentido es útil la propuesta de Faist (1999), quien propone el concepto de espacios sociales transnacionales, entendidos como el resultado de combinaciones de vínculos sociales y simbólicos, redes de organizaciones, posiciones de redes y organizaciones que se encuentran ubicadas en dos lugares localizados en contextos geográficos y políticos distintos. Estos espacios pueden ser tipificados a partir de dos indicadores: la intensidad de las redes y el tiempo que llevan funcionando.
Participar activamente en la vida económica, social, y política del país de origen y del de destino, al mismo tiempo. Es decir, no todos los migrantes peruanos son Transmigrantes. El fenómeno de transmigración es eminentemente uno de primera y segunda generación, porque, para la tercera generación, los individuos se asimilan más a la cultura del país de destino que a la del de origen y pierden el interés en interactuar en esa última sociedad. A diferencia de la asimilación cultural es la manera como se señala al proceso de integración de un grupo etnos-cultural tal como los inmigrantes, grupos étnicos minoritarios y otros dentro de lo que se tiene establecido como lo común a una comunidad mayor o dominante. La presunción de que dichos elementos generales son la garantía de la convivencia cultural dentro de un estado o territorio, es la que motiva el inicio de dicho proceso. En este proceso, el grupo que es absorbido y pierde por lo general su originalidad de manera parcial o total como sus maneras de hablar, su dialecto, sus peculiaridades en el habla, sus modos de ser y otros elementos de su identidad cultural cuando entra en contacto con la sociedad o cultura dominante.
El otro aspecto de asimilación10 cultural se da con la llegada de los inmigrantes y refugiados a otras naciones. El proceso puede ser complejo, porque no siempre estos grupos de personas desean asimilarse al país en donde se encuentran, sino que muchos prefieren defender la cultura propia de sus lugares de origen, aspecto que puede traerles dificultades como marginación y el rechazo. Otros realizan el proceso de asimilación de manera parcial y pragmática, es decir, asumen los elementos culturales dominantes en sociedad y conservan sus manifestaciones propias en el ámbito íntimo. Otros en cambio se muestran completamente abiertos a asumir la cultura que los acoge y olvidan con frecuencia sus orígenes llegando incluso a renegar de ellos. Lógicamente los niños son los más abiertos a la asimilación cultural.
La asimilación es también el estado de cambio. Esto ocurre por lo general con los inmigrantes. Cuando nuevos inmigrantes llegan al país, las personas que los rodean tratan de cambiarlos en lo que esa sociedad espera que ellos sean. Tarde o temprano los inmigrantes dejan de lado ciertas prácticas que les identificaban con su propia cultura y se vuelven algo similar a todos los demás a causa de la asimilación. La asimilación ocurre también en los casos de colonización.
En la época contemporánea, el tema de la asimilación cultural de los inmigrantes es común en países industrializados en donde llegan cientos de inmigrantes de países en vías de desarrollo que no sólo se constituyen en una fuerza de trabajo, sino que traen consigo sus propias manifestaciones culturales y lenguas. El elemento cultural que resulta más conflictivo es sin duda el de la religión al cual los grupos humanos se aferran con mayor fidelidad.
El surgimiento de los enclaves socio-culturales, son un mecanismo de mantenimiento y continuidad de las asociaciones de migrantes, constituye tanto un ámbito como un mecanismo de preservación de la identidad". (Güemes, 1984, 132). Hasta aquí la cita de lo que es un enclave, y que nos permitirá entonces, comprender los mecanismos de reproducción social de la identidad en los entornos urbanos por parte de los emigrantes peruanos en los Estados Unidos. En estos casos, la identidad se mantiene en los enclaves a partir de formas de organización grupal que generan empatía entre los actores, creando lazos y compromisos sociales recíprocos al interior de los enclaves de solidaridad con el país de origen; generando a su vez, diferenciación social hacia el exterior. Esto permite que definan las fronteras grupales o límites simbólicos de la acción social colectivamente reconocida. Las instituciones sociales del enclave tienen como finalidad el mantenimiento del estilo histórico-cultural común, que al contacto con la nueva sociedad, y la nueva matriz de identidad o nuevo estilo cultural. Se mantienen las instituciones, se adoptan nuevos valores, se mantiene el principio básico de la solidaridad mecánica ya que sirve de cemento invisible para cohesionar al grupo, permitiendo el auto adscripción. Sin embargo, las valoraciones personales sobre ciertos rasgos culturales cambian, se adoptan elementos de la cultura determinante del stablishment y se van asimilando elementos ideológicos del stablishment, a las formas de conducta individual y de acción social sobre todo hacia el exterior.
En el caso de los inmigrantes peruanos podemos observar una dicotomía en el proceso de asimilación cultural de manera parcial es decir asumen elementos de la cultura dominantes pero a la vez conservan sus manifestaciones propias en el ámbito intimo de la comunidad, una expresión son los enclaves socio-culturales a través de las diversidad de organizaciones peruanas: organizaciones asistenciales de ayuda a Perú, organizaciones religiosas, organizaciones deportivas, organizaciones étnico culturales, organizaciones folklóricas, entre otras. Los grupos étnico o etnia: con este nombre se designa a un grupo humano que posee rasgos físicos y biológicos similares, además de compartir tradiciones históricas, lengua, cultura, creencias y valores, es decir, un grupo que forma una comunidad socio-cultural forjada históricamente. Las etnias poseen un árbol genealógico evolutivo común, y se asientan sobre relaciones de parentesco y de herencia que se remontan hacia lejanas épocas del pasado. No hay que confundirla con el concepto de "raza", ya que éste designa la existencia de unos rasgos genéticos que son comunes y exclusivos de un grupo humano. Sin embargo, dentro de cada raza existen numerosas etnias, ya que muchos de los grupos humanos que constituyen una raza han tenido una experiencia histórica y cultural exclusiva, diferente de otras experiencias vividas por el resto de los grupos.
Los enclaves étnicos son grupos de hablantes de una misma lengua que pueden tener una o todas las características siguientes: formar grupos compactos y aislados del resto de la población, localizados en asentamientos cercanos o en la misma colonia, barrio o vecindad; trabajar en las mismas actividades; recrear muchas de sus pautas culturales en sus nuevos asentamientos, tales como el vestido, la lengua, formas de vida, de alimentación, etc.; mantener vínculos con sus comunidades de origen que pueden ser de diferente índole: visitas periódicas a la comunidad y participación en las fiestas, aportación de dinero para mejoras en el pueblo, mantenimiento de su casa o tierras y para bautizar a sus hijos en la comunidad, y hasta tener formas organizativas formales de vinculación que les permite incidir en la vida comunitaria.
Muchas de las organizaciones peruanas en los Estados Unidos comparten las tradiciones, históricas, lengua, cultura creencias y valores. Algunas de ellas se remontan hacia las épocas a del pasado. En Atlanta, la Cámara de Comercio de Georgia, la Hermandad del Señor de los Milagros, la Asociación Peruana Americana, la Hermandad del San Martin de Porres y la Asociación de Residentes de Huancayo. En Boston, la Comunidad Peruano América, la Comunidad Peruana de Massachusetts, la Asociación de Peruanos Unidos y la Asociación Inca Runa. Y en Carolina del Norte, La Asociación Peruana de Carolina del Norte y the United Peruvian Association of Nashville. Estas organizaciones comparten la tradición religiosa y la nostalgia peruana y construyen una memoria colectiva con la diáspora.
El estudio nos revela que las 3 principales organizaciones que sirven de enclave socio-cultural son las identidades religiosas, (La Asociaciones del Hermandad del Señor de los Milagros y la Hermandad de San Martin de Porres), es interesante detenernos en la Hermandad de San Martin de Porras, porque es un santo negro, el cual es venerado por generaciones de origen mulato. Las hermandades religiosas peruanas fortalecen la identidad religiosa de los peruanos en la diáspora, los valores de culturales que se expresan a través de la interacción social expresa grados sociales, estableciendo campos de acción que se expresan mediante la diferenciación del statu quo social.
La interacción social resultante de la dinámica, expresa grados sociales, estableciendo campos de acción que se expresan mediante la diferenciación del statu quo social. En la interacción social, se va a observar a los individuos y como estos influyen mutuamente y adaptan su comportamiento frente a los demás. Cada individuo va formando su identidad específica en la interacción con los demás miembros de su campo social en la que tiene que acreditarse. En Georgia las organizaciones: La Asociación Peruano Americana de Georgia y la Asociación de Residentes Huancayo-Perú.
Las Cámaras de Comercio peruanas en las Estados Unidos demuestra que no sólo la actividad comercial era lo que le interesaba a cada peruano que ejerce el comercio , sino que además una gran preocupación por organizarse e impulsar su actividad comercial a través de un organismo representativo, lo que en la actualidad se traduciría lo que es la Cámara de Comercio como Asociación o Institución que a nivel local, provincial, nacional o internacional, agrupa a los comerciantes (sean importadores, exportadores, industriales, mayorista, minoristas, etc.) con el objeto de proteger sus intereses, mejorar sus actividades comerciales sobre la base de la mutua cooperación y promover su prosperidad, así como también la de la comunidad en la cual se halla asentada. En Chicago existen 15 organizaciones: The Academic Liason Peruvian- American Cultural Advancement (Alpaca), El Club Deportivo Íntimos de Chicago, el Club Alianza Lima, La Hermandad del Señor de los Milagros, the Peruvian Association of Central Indiana, the Peruvian Arts Society, Capitulo del Medio Oeste de Instituciones Peruanas, la Asociación Peruana del Gran Cincinnati, Ayuda al Hospital del Nino, Peruanos Unidos-Columbus, the Peruvian Art Society, the Peruvian American Chamber of Connmerce of Chicago y the Peruvian American Medical Society.
En Denver, Colorado existen aproximadamente 20 organizaciones: la Asociación Peruana de Kansas City, la Asociación Peruana de Preston, El Club Deportivo Defensor Evanston, La Hermandad del Señor de los Milagros de Denver, El Instituto de Estudios Vallejianos, la Asociación de Residentes Peruanos de North Colorado, El Club Peruano de Brigham Young University, la Comunidad Peruana de Omaha, el Club Alianza Lima de Sun Valley, the Denver Power Sport Academia, El Club Perú Denver, El Club Unión Canipaco, La Hermandad del Señor de los Milagros de Utah, La Asociación Deportiva Los Andes, Fraternidad Peruana de Utah, Asociación Peruana de Utah, Eagle Kuntur-Huasy Latín American Fundación, Canipaco Futbol Club, La Asociación para el desarrollo Eagle-Cóndor Humanitarian Andes y el Expreso Verde Huancayo. Las identidades deportivas, estas organizaciones agrupan mayormente joven entre las edades de 18 a 36 anos. Los peruanos en el exterior viven agrupados en diversos tipos de asociaciones, colectividades e instituciones. Estos lazos fortalecen la identidad en el exterior, la posibilidad de seguir manteniendo su idiosincrasia, los valores de su cultura, y la forma de ver la vida. Los clubes deportivos establecen campos de acción que se expresan mediante la interacción social, lazos de identidad, manteniendo su idiosincrasia en conexión con los miembros de la diáspora peruana y la construcción de la identidad colectiva. Otro aspecto son las organizaciones provinciales que buscan preservan la identidad étnica y cultural en su expresiones artísticas y en la música de sus regiones, especialmente de los emigrantes peruanos originarios de los departamentos del interior del Perú. Estos son los principales enclaves étnicos-religiosos-socioculturales. La comunidad peruana en los Estados Unidos elabora una cultura musical en el proceso de adaptación y transculturación. La música peruana se convierte en el elemento más importante en el proceso de la memoria colectiva e identidad de la diáspora. Entre los factores que facilitan forjar una comunidad musical-cultural está la formación de las instituciones, asociaciones y grupos músico-culturales; y la confraternidad se afirma la percepción de "peruanidad" en un contexto social hibrido.
La diáspora peruana a través de las expresiones músico-culturales elabora una identidad colectiva. En este repertorio se enmarcan los géneros que reflejan los valores culturales y promueven el estatus del sector dentro de la jerarquía social. Generalmente, se reconocen tres esferas principales de producción musical, estas son: 1) música andina; 2) música criolla/afro-peruana; y 3) música tropical. La música criolla ha sido favorecida por el público peruano, independientemente de raza o clase social. Representado por géneros tales como el vals y el tonderito, la música criolla suele invocar sentimientos de seguridad en la audiencia con temas vinculados con el pueblo y la vida cotidiana. Vinculadas con el desarrollo de la música criolla están las expresiones de los Afro-peruanos, formando una tradición mayormente reconstruida por Nicomedes Santa Cruz (1925-1992). Este movimiento músico-cultural ha resultado en el surgimiento y subsecuente codificación de varios géneros como el landó, y el festejo. La música establece firmemente una anclada en la tradición proporcionando opciones musicales conducidas por una mezcla de recuerdos y nostalgia por una patria idealizada. Estas selecciones reflejan la manera en que los inmigrantes elaboran auto-representaciones musicales y refuerzan el lazo psicológico con la cultura base. Porque la memoria colectiva está constantemente recreada a través de la música criolla y afro-peruana. La música de estas dos esferas permanece firmemente anclada en la tradición.
La emigración de peruanos y peruanas es más compleja, no se puede solo explicar por el deterioro económico, la falta de oportunidades y la violencia social. Nuevos elementos en el proceso de la transnacionalización de la economía peruana y la política social-cultural peruana han expulsados a los peruanos a emigrar a los Estados Unidos. En Hartford 18 organizaciones de diversas temáticas, Oderi Organization to Defend Rights, Hermandad del Señor de los Milagros dl Perú, Perú- Posible, Comité Perú Connecticut, Mestizo Manta, Peruvian Inca Club, Hermandad del Señor de los Milagros en Rodhe Island, Hermandad de San Martin de Porres, Comunidad del Señor de la Justicia, Partido Aprista Peruano, Club Social Bolognesi, Asociaciones de Instituciones Peruanas en los Estados Unidos, Asociación de Profesionales Peruano-Americanos, Brisas del Titicaca, Asociación por la Promoción y la Conservación de la Amazonia, Virgen del Rosario Pararca-Ayacucho, Peruvian American Community Center, Club Rosario de Ocros y el Comité Apóstol Santiago El Mayor. En Houston encontramos 10 organizaciones que representan el mosaico de la inmigración peruana. La Asociación de Estudiantes Peruanos Universidad A & M, La Asociación Peruana de Houston, Grupo Folklórico "Raíces", Asociación Peruana de Austin, Asociación Peruana de Dallas, Club Perú de North Texas, Hermandad Señor de los Milagros, Austin-Lima Sister Cities Committe, Peruvian American Medical Asociotation, La Sociedad Peruana de San Antonio y el Club de Damas Peruanas en Dallas.
En los Ángeles una de las ciudades que ha venido recibiendo una diversidad de inmigrantes entre ellos la comunidad peruana. Existen aproximadamente 22 organizaciones, entre ellas muchas mantiene una relación con el lugar de origen, las cuales proveen ayuda asistencial y conservan las tradiciones culturales peruanas en los aspectos de la tradición religiosa, la música floklorica, andina, la música negra, y la diversidad de las gastronomía peruana de las diversas regiones del Perú. (Tumbes, Piura, Chiclayo, Iquitos, Huancayo, Pisco, Moquegua, Lima y el Callao.) Entre la diversidad de las organizaciones peruanas esta La Fundación Orfanato Nino Jesús de Praga, La Cámara de Comercio Peruana de California, La Asociación de Instituciones Peruanas en los Estados Unidos y Canadá, Peruvian American Medical, Asociación Peruana Internacional de Cultura, Fundación Inca Internacional de Cultura, La Asociación Leonciopradina, El Club Arequipa, El Club Huancayo, La Asociación de Ex-cadetes de Colegios Militares, La Hermandad del Señor de los Milagros del Centro de los Ángeles, Comité Pro-Paita, La Hermandad Señor de los Milagros del Valle San Juna Fernando, El Comité de Damas Peruanas Madre de Calcuta, La Hermandad del Señor de los Milagros de Van Nuys, El Club Libertad, La Asociación " Peruvian American Dental", Perú Negro, La Hermandad del Señor de los Milagros del Valle de Pasadena, La Asociación Chalaca del Sur de California, La Asociación "Peruvian American Medical Society," y la Asociación de Instituciones Peruana de Estados Unidos y Canadá de Santa Ana, California.
En la interacción social, los emigrantes peruanos se puede observar cómo se influyen mutuamente y adaptan su comportamiento frente a los demás. Cada individuo va formando su identidad específica con los demás miembros de su campo social en la que tiene que acreditarse. La interacción social resultante de la dinámica de las organizaciones e instituciones étnico-culturales. El cambio se evidencia a través de las interacciones de cada persona con el resto social y como el conjunto afecta al individuo, marcando un comportamiento de comunicación global de sujetos relacionados entre sí. Las formas y convenciones de la dinámica social están marcadas por la historia y sujetas, por tanto, a un cambio permanente.
El estudio nos revela que las 3 principales organizaciones que sirven de enclave socio-cultural son las identidades religiosas, (La Asociaciones del Hermandad del Señor de los Milagros y la Hermandad de San Martin de Porres), es interesante detenernos en la Hermandad de San Martin de Porras, porque es un santo negro, el cual es venerado por generaciones de origen mulato. Las hermandades religiosas peruanas fortalecen la identidad religiosa de los peruanos en la diáspora, los valores de culturales que se expresan a través de la interacción social expresa grados sociales, estableciendo campos de acción que se expresan mediante la diferenciación del statu quo social.
La interacción social resultante de la dinámica, expresa grados sociales, estableciendo campos de acción que se expresan mediante la diferenciación del statu quo social. En la interacción social, se va a observar a los individuos y como estos influyen mutuamente y adaptan su comportamiento frente a los demás. Cada individuo va formando su identidad específica en la interacción con los demás miembros de su campo social en la que tiene que acreditarse. En Georgia las organizaciones: La Asociación Peruano Americana de Georgia y la Asociación de Residentes Huancayo-Perú.
Las Cámaras de Comercio peruanas en las Estados Unidos demuestra que no sólo la actividad comercial era lo que le interesaba a cada peruano que ejerce el comercio , sino que además una gran preocupación por organizarse e impulsar su actividad comercial a través de un organismo representativo, lo que en la actualidad se traduciría lo que es la Cámara de Comercio como Asociación o Institución que a nivel local, provincial, nacional o internacional, agrupa a los comerciantes (sean importadores, exportadores, industriales, mayorista, minoristas, etc.) con el objeto de proteger sus intereses, mejorar sus actividades comerciales sobre la base de la mutua cooperación y promover su prosperidad, así como también la de la comunidad en la cual se halla asentada. En Chicago existen 15 organizaciones: The Academic Liason Peruvian- American Cultural Advancement (Alpaca), El Club Deportivo Íntimos de Chicago, el Club Alianza Lima, La Hermandad del Señor de los Milagros, the Peruvian Association of Central Indiana, the Peruvian Arts Society, Capitulo del Medio Oeste de Instituciones Peruanas, la Asociación Peruana del Gran Cincinnati, Ayuda al Hospital del Nino, Peruanos Unidos-Columbus, the Peruvian Art Society, the Peruvian American Chamber of Connmerce of Chicago y the Peruvian American Medical Society.
En Denver, Colorado existen aproximadamente 20 organizaciones: la Asociación Peruana de Kansas City, la Asociación Peruana de Preston, El Club Deportivo Defensor Evanston, La Hermandad del Señor de los Milagros de Denver, El Instituto de Estudios Vallejianos, la Asociación de Residentes Peruanos de North Colorado, El Club Peruano de Brigham Young University, la Comunidad Peruana de Omaha, el Club Alianza Lima de Sun Valley, the Denver Power Sport Academia, El Club Perú Denver, El Club Unión Canipaco, La Hermandad del Señor de los Milagros de Utah, La Asociación Deportiva Los Andes, Fraternidad Peruana de Utah, Asociación Peruana de Utah, Eagle Kuntur-Huasy Latín American Fundación, Canipaco Futbol Club, La Asociación para el desarrollo Eagle-Cóndor Humanitarian Andes y el Expreso Verde Huancayo. Las identidades deportivas, estas organizaciones agrupan mayormente joven entre las edades de 18 a 36 anos. Los peruanos en el exterior viven agrupados en diversos tipos de asociaciones, colectividades e instituciones. Estos lazos fortalecen la identidad en el exterior, la posibilidad de seguir manteniendo su idiosincrasia, los valores de su cultura, y la forma de ver la vida. Los clubes deportivos establecen campos de acción que se expresan mediante la interacción social, lazos de identidad, manteniendo su idiosincrasia en conexión con los miembros de la diáspora peruana y la construcción de la identidad colectiva. Otro aspecto son las organizaciones provinciales que buscan preservan la identidad étnica y cultural en su expresiones artísticas y en la música de sus regiones, especialmente de los emigrantes peruanos originarios de los departamentos del interior del Perú. Estos son los principales enclaves étnicos-religiosos-socioculturales. La comunidad peruana en los Estados Unidos elabora una cultura musical en el proceso de adaptación y transculturación. La música peruana se convierte en el elemento más importante en el proceso de la memoria colectiva e identidad de la diáspora. Entre los factores que facilitan forjar una comunidad musical-cultural está la formación de las instituciones, asociaciones y grupos músico-culturales; y la confraternidad se afirma la percepción de "peruanidad" en un contexto social hibrido.
La diáspora peruana a través de las expresiones músico-culturales elabora una identidad colectiva. En este repertorio se enmarcan los géneros que reflejan los valores culturales y promueven el estatus del sector dentro de la jerarquía social. Generalmente, se reconocen tres esferas principales de producción musical, estas son: 1) música andina; 2) música criolla/afro-peruana; y 3) música tropical. La música criolla ha sido favorecida por el público peruano, independientemente de raza o clase social. Representado por géneros tales como el vals y el tonderito, la música criolla suele invocar sentimientos de seguridad en la audiencia con temas vinculados con el pueblo y la vida cotidiana. Vinculadas con el desarrollo de la música criolla están las expresiones de los Afro-peruanos, formando una tradición mayormente reconstruida por Nicomedes Santa Cruz (1925-1992). Este movimiento músico-cultural ha resultado en el surgimiento y subsecuente codificación de varios géneros como el landó, y el festejo. La música establece firmemente una anclada en la tradición proporcionando opciones musicales conducidas por una mezcla de recuerdos y nostalgia por una patria idealizada. Estas selecciones reflejan la manera en que los inmigrantes elaboran auto-representaciones musicales y refuerzan el lazo psicológico con la cultura base. Porque la memoria colectiva está constantemente recreada a través de la música criolla y afro-peruana. La música de estas dos esferas permanece firmemente anclada en la tradición.
La emigración de peruanos y peruanas es más compleja, no se puede solo explicar por el deterioro económico, la falta de oportunidades y la violencia social. Nuevos elementos en el proceso de la transnacionalización de la economía peruana y la política social-cultural peruana han expulsados a los peruanos a emigrar a los Estados Unidos. En Hartford 18 organizaciones de diversas temáticas, Oderi Organization to Defend Rights, Hermandad del Señor de los Milagros dl Perú, Perú- Posible, Comité Perú Connecticut, Mestizo Manta, Peruvian Inca Club, Hermandad del Señor de los Milagros en Rodhe Island, Hermandad de San Martin de Porres, Comunidad del Señor de la Justicia, Partido Aprista Peruano, Club Social Bolognesi, Asociaciones de Instituciones Peruanas en los Estados Unidos, Asociación de Profesionales Peruano-Americanos, Brisas del Titicaca, Asociación por la Promoción y la Conservación de la Amazonia, Virgen del Rosario Pararca-Ayacucho, Peruvian American Community Center, Club Rosario de Ocros y el Comité Apóstol Santiago El Mayor. En Houston encontramos 10 organizaciones que representan el mosaico de la inmigración peruana. La Asociación de Estudiantes Peruanos Universidad A & M, La Asociación Peruana de Houston, Grupo Folklórico "Raíces", Asociación Peruana de Austin, Asociación Peruana de Dallas, Club Perú de North Texas, Hermandad Señor de los Milagros, Austin-Lima Sister Cities Committe, Peruvian American Medical Asociotation, La Sociedad Peruana de San Antonio y el Club de Damas Peruanas en Dallas.
En los Ángeles una de las ciudades que ha venido recibiendo una diversidad de inmigrantes entre ellos la comunidad peruana. Existen aproximadamente 22 organizaciones, entre ellas muchas mantiene una relación con el lugar de origen, las cuales proveen ayuda asistencial y conservan las tradiciones culturales peruanas en los aspectos de la tradición religiosa, la música floklorica, andina, la música negra, y la diversidad de las gastronomía peruana de las diversas regiones del Perú. (Tumbes, Piura, Chiclayo, Iquitos, Huancayo, Pisco, Moquegua, Lima y el Callao.) Entre la diversidad de las organizaciones peruanas esta La Fundación Orfanato Nino Jesús de Praga, La Cámara de Comercio Peruana de California, La Asociación de Instituciones Peruanas en los Estados Unidos y Canadá, Peruvian American Medical, Asociación Peruana Internacional de Cultura, Fundación Inca Internacional de Cultura, La Asociación Leonciopradina, El Club Arequipa, El Club Huancayo, La Asociación de Ex-cadetes de Colegios Militares, La Hermandad del Señor de los Milagros del Centro de los Ángeles, Comité Pro-Paita, La Hermandad Señor de los Milagros del Valle San Juna Fernando, El Comité de Damas Peruanas Madre de Calcuta, La Hermandad del Señor de los Milagros de Van Nuys, El Club Libertad, La Asociación " Peruvian American Dental", Perú Negro, La Hermandad del Señor de los Milagros del Valle de Pasadena, La Asociación Chalaca del Sur de California, La Asociación "Peruvian American Medical Society," y la Asociación de Instituciones Peruana de Estados Unidos y Canadá de Santa Ana, California.
En la interacción social, los emigrantes peruanos se puede observar cómo se influyen mutuamente y adaptan su comportamiento frente a los demás. Cada individuo va formando su identidad específica con los demás miembros de su campo social en la que tiene que acreditarse. La interacción social resultante de la dinámica de las organizaciones e instituciones étnico-culturales. El cambio se evidencia a través de las interacciones de cada persona con el resto social y como el conjunto afecta al individuo, marcando un comportamiento de comunicación global de sujetos relacionados entre sí. Las formas y convenciones de la dinámica social están marcadas por la historia y sujetas, por tanto, a un cambio permanente.
Fuente: La Diáspora Peruana autor Jorge Y Gonzales-Lara
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